San José, California - En un lanzamiento que ha marcado un antes y un después para el mundo de la inteligencia artificial, NVIDIA ha presentado hoy su gigantesca plataforma de computación: Blackwell. Lejos de ser una simple evolución más, este éxito histórico valida la arriesgada pero veloz filosofía de desarrollo de la compañía, confirmando que su visión de un ecosistema de superchips totalmente integrado es, por primera vez, una realidad tangible.
Dos Componentes Hacia el Futuro.
La plataforma Blackwell se compone de dos elementos colosales: el superchip GB200, diseñado para la titánica tarea de la computación masiva, y la interconexión NVLink, que transportará datos a velocidades sin precedentes para clústeres de miles de GPUs. La clave del éxito reside en que ambos componentes son totalmente escalables y eficientes, la gran apuesta de NVIDIA para reducir radicalmente los costos y acelerar el desarrollo de la IA a una escala nunca vista..
El núcleo de su diseño es la escalabilidad y la eficiencia total de ambas etapas, un concepto revolucionario para reducir drásticamente los costos de desarrollo y entrenamiento de modelos de IA y abrir la puerta a innovaciones en campos como la robótica, la medicina y la investigación científica. La potencia de Blackwell es igualmente notable, con innovaciones arquitectónicas que le otorgan la capacidad de procesar trillones de parámetros en modelos de IA a una velocidad y eficiencia sin igual.